martes, 22 de septiembre de 2015

VIDEOCONFERENCIAS "CONTRUCCIONISMO SOCIAL, POSMODERNIDAD Y PRÁCTICAS COLABORATIVAS". IFAMI


Ciclo de videoconferencias dictadas para IFAMI por Josep Segui, de Umansenred, Barcelona, Rocío Chaveste y Papusa Molina, del Instituto Kanankil, México.

Construccionismo social y psicología - Josep Seguí.





Prácticas colaborativas y dialógicas en terapia. Rocío Chaveste.


jueves, 10 de septiembre de 2015

TOMÁS IBAÑEZ SOBRE MICHEL FOUCAULT. Hacia una actitud de insumisión y rebeldía.

Tomás Ibañez es un psicólogo social, un pensador del socioconstruccionismo y un libertario. Además es un gran conocedor del pensamiento de Michel Foucault.

Invariantes foucaultianas.
  1. Romper la imagen que nos tiene presos.
  2. Desmantelar y destruir el apriori histórico que hace posibles esa imagen que nos aprisiona, que la construye y nos impide ver que es solo una imagen.
  • Por imposible que parezca, podemos subvertir el apriori histórico de la experiencia posible y única.
  • El sujeto no es constituyente sino que está constituido.
  • El poder se suicida tan pronto aniquila la libertad, porque no puede vivir sin ella. La necesita para doblegarla y constreñirla.
  • El poder solo existe ahí donde hay libertad...y resistencia.
  • La libertad es la cualidad ontológica de la ética. Sin libertad no hay ética posible.
  • "Sueño con el intelectual destructor de evidencias y de universalismos".

sábado, 5 de septiembre de 2015

HIPNOSIS ORIENTADA A LAS SOLUCIONES

César Vásquez Olcese y Charo Gamarra Lavado


O'Hanlon realiza una interesante integración de la hipnosis naturalista o ericksoniana y su peculiar forma de entender el Enfoque de Soluciones, caracterizado por un énfasis en lo emocional, el respeto del proceso y el discurso del consultante (O'Hanlon, 1999). 

El abordaje realizado con ambos casos fue una integración de la técnica de la Pregunta del Milagro y su posterior presentación al consultante, inducido a un estado de trance hipnótico por técnicas rápidas y naturalistas de inspiración ericksoniana (especialmente la técnica del handshake).  

Se consideró que el estado de hipnosis podía cumplir la función de concentrar la atención del consultante en el objetivo que desea alcanzar (objetivo co-construido a través de la Pregunta del Milagro), y facilitar de este modo su realización e incorporación a la vida de éste. Vale decir, la hipnosis como un catalizador de los efectos de la Pregunta del Milagro.

Se elaboró un protocolo de tratamiento conformado por cinco sesiones: una de evaluación y pre-test, y cuatro de abordaje, seguimiento y post-test. Se tuvo especial cuidado en el uso de un lenguaje presuposicional (O'Hanlon y Weiner-Davis, 1989), en respetar los contenidos e intenciones del consultante expresados a través de su "milagro", y en la aplicación de los principios de la hipnosis naturalista y no autoritaria. Este procedimiento fue parte de una trabajo de investigación de grado realizada por los autores.

El caso de Tomás.-
Tomás es un hombre joven, en la tercera década de su vida. Aunque profesional, al momento del contacto inicial está realizando trabajos eventuales y prácticas per-profesionales no remuneradas. Vive en casa de su familia con parte de ésta. Se acerca a solicitar ayuda aduciendo sentirse muy decaído, vacío, desanimado y sin perspectivas de futuro. Como que está "en blanco". Al indagarse más, manifiesta que hace cuatro meses se enteró de que es un hijo adoptivo, y piensa que esa noticia ha constituido un duro golpe para él. Esta revelación lo ha desorientado con respecto a sus valores, sentimientos de apego y a la forma como ve el mundo y su lugar en él. Aunque su familia no ha cambiado su actitud y trato para con él, Tomás piensa que lo que consideraba antes sólido se ha tornado ahora quebradizo y muy inestable. Según sus palabras, está pasando por una severa crisis de identidad.

Al planteársele la Pregunta del Milagro, lo que Tomás elaboró fue lo siguiente: 

"Me levantaría con el ánimo diferente y una buena disposición hacia mi familia. Voy a hacer las cosas con más potencia, sin ataduras y sin miedos. Me veo seguro, estable, con firmeza en  mis palabras y acciones. Quienes me conocen me ven con otro semblante, y me lo dicen.  Quien se va a percatar primero de estos cambios va a ser mi mejor amiga. Se va a dar cuenta primero al oírme hablar, al hacer mis actividades en el centro donde hago prácticas Voy a pensar en seguir constante, perenne en mi camino de enfrentar las situaciones. Mi pareja también lo nota: la actitud diferente, ser más conciso y concreto en mis acciones; lo haría, lo ejecutaría. Eso aumentara mi nivel de confianza, pues hay un decir y hacer que van de la mano. Poner acción y movimiento, pensar y hacer. Posiblemente cambie mi postura, me sienta mejor, con mayor fuerza. A partir de esa base todos estos cambios irradiarían, a lo social, a lo familiar".

Desde la segunda sesión, y en todas las posteriores, Tomás fue reportando cambios significativos y la progresiva consecución de su milagro. Lo primero que reportó fue el haberse puesto a practicar un deporte, como expresión de su deseo de tomar iniciativas, sentirse activo y conciliar el "decir" con el "hacer"; esto fue seguido de un mayor acercamiento hacia su familia, incluyendo mayor diálogo, pasar tiempo juntos y el fomentar cierta recuperación de la confianza. En la tercera sesión refirió que estaba postulando a un puesto de trabajo en un ciudad vecina, a fin de consolidar su deseo de planear y ejecutar lo planeado, y en la quinta sesión (sesión final), nos reportó que ya estaba trabajando en el puesto al que postuló y nos dio la noticia de que iba a ser padre. Esta situación lo llevó a planificar acciones con la finalidad de vivir con su pareja y su hijo, y constituir una familia propia. En cuanto a su familia, manifestó sentirse más a gusto, más incluido, y sentirse más en confianza.

En la sesión final se consultó a Tomás acerca de si consideraba que su meta terapéutica estaba cumplida, y nos refirió que sí. Para concretizar aún más se le hizo la pregunta de escala: si pensamos en una escala de 0 a 10, donde 0 significa que su milagro no se ha cumplido en absoluto y 10 que está totalmente cumplido, ¿dónde creía que se encontraba al finalizar el proceso terapéutico? Sin pensarlo mucho nos dijo con seguridad "estoy en un 9". Luego agregó: "Llegar a 10 es sólo cuestión de tiempo".

Finalmente se le preguntó qué es lo que creía que más le ayudó, y dijo que fue muy importante poder imaginar lo que quería. Pensar en el milagro le dio un norte, una guía. 

El caso de Martha.-
Martha es una mujer casada, ama de casa, cercana a los cuarenta años. Inicialmente expresa que luego de un incidente hace cuatro meses, donde casi se atoró, ahora experimenta  un gran temor de deglutir. Le da la impresión de que no lo va a poder hacer y que va a ahogar. Afirma que antes ya había experimentado un temor similar y que le costó mucho superarlo. En una ocasión casi se atoró. Aunque ocurrió sólo una vez, fue suficiente para tenerle "verdadero terror" al hecho de tomar agua, comer o pasar la saliva. Esta situación, aparte de generarle miedo le produce también vergüenza y impide estar tranquila. No puede estar en reuniones sociales, salir como antes; teme que si bebe o come algo se ahogue o le de algo en la cabeza. Cuando está en situaciones como las descritas percibe que se le adormece el oído y se le calienta la cabeza, y entonces le viene la sensación de terror. Se aturde, ya no presta atención a la conversación. Luego refiere que a este temor se suma una situación conyugal muy complicada. Su pareja la maltrata psicológicamente, trata de afectar negativamente su autoestima y denigrarla con frecuencia. Como consecuencia de todo lo anterior, Martha piensa que ha dejado de ser como solía percibirse: activa, jovial, emprendedora, madre cuidadosa, buena ama de casa, etc. 

El milagro que Martha elaboró fue el siguiente:

"Voy a estar más tranquila, sin temor a estar sola. Hago mis cosas igualmente con tranquilidad. Tomo la leche, tomo agua tranquila. Voy a tomar mucha agua. Puedo pasar la saliva con tranquilidad. Pongo su música, estay feliz, arreglando su casa. Me voy a dar cuenta de que el milagro ha ocurrido hacia las 8.30 o 9 de la mañana, al tomar mi pastilla. Me doy cuenta que lo puede pasar y no tengo miedo. Me pongo a hacer las cosas de la casa, a ayudar a mi hijo con sus tareas, a enseñarle como antes, a poner orden otra vez mi hogar. Les comento que ya no tiene miedo a mi mamá, a mi hermana y a mi otra hermana que vive en el extranjero y está muy preocupada por mi. Va a volver a ser la de antes. Mi familia de origen va a ver a la Martha de antes".

Al igual que pasó con el caso anterior, con Martha los cambios empezaron a manifestarse desde el inicio. En la segunda sesión, dos semanas después, refirió sentirse más tranquila, sin sentir sentir el temor de ahogarse. Como que no se daba cuenta ya de ese temor; como que se olvida. Ahora sienta a hacer las tareas con su hijo. Se pone a prueba pasando la saliva, tomando agua o comiendo, pero la pasa bien. Hace las cosas de la casa, pone su música, esta entusiasmada de sentarse con su hijo a estudiar. Alegre porque su hijo ahora estudia casi sólo y antes no lo hacia. Solo en una ocasión, el día anterior a la consulta, sintió que se podía ahogar pero salió e hizo sus cosas y lo dejo de lado. Salió, puso su música a volumen, hizo sus cosas y se olvidó. Vinieron sus hijos y se olvidó. "Fue extraordinario", refirió. 

Está descubriendo que puede superar este temor. Al constatar y narrar estos cambios llega a la conclusión que es una mujer valiente y fuerte. 

En relación al tema del maltrato de su pareja refiere: "No me va a ganar". "Yo no soy menos". "Soy mucha mujer". Se va a demostrar a sí misma que es fuerte, que va a ser la misma de antes. Piensa firmemente que estos cambios e intenciones le van a traer muchos beneficios, logros personales, ponerse pilas, volver a los negocios. Antes ella  se mantenía a si misma, no dependía del esposo. Eso es lo que quiere: no depender. 

En la sesión siguiente -la tercera- dice que sigue tranquila. En tres ocasiones sintió (o temió) que podía ahogarse, pero lo dejó pasar. Puso su música, se abocó a sus labores y se olvidó del asunto. Ya no le preocupa tanto. Retomó su actividad comercial trayendo mercadería de la capital y empezando a venderla entre sus amistades y conocidos. Refiere que el fin de semana perdió el miedo y salió a la calle con amigas, tomó alcohol en cantidad regular sin temor y se fue tranquila a su casa. No experimentó ahogamientos ni nada. Estos cambios fueron notorios para sus amigas y familiares cercanos.

Dice también que empezó a ponerle límites al marido y a sus maltratos. Ahora le responde cosas muy puntuales, lo deja perplejo porque ya no se deja traer abajo, y luego se va sin pelear. Ya no llora ni cae en su juego. Nos dice: "me he dado cuenta que soy mucha hembra para él. Cuando lo deje ya se dará cuenta de eso".

En la última sesión Martha manifiesta que se ha separado de "cuerpo". Aunque están aún en la misma casa ya no duermen juntos. Ella sigue haciendo su vida, llevando a cabo sus iniciativas, sin tomarlo en cuenta al marido. Se siente muy contenta con su negocio. Se fue con la suegra a su tratamiento del cáncer en la capital y aprovechó para traer mercadería. Ya casi todo lo vendió. Está con eso muy bien. Confía mucho en poder seguir así, y no teme recaer, pues sabe lo que debe hacer en caso de que eso ocurra.

Martha evalúa sus avances como algo "increíble" y como "un verdadero milagro". Dice que comentó lo que está experimentando con sus amistades y que está recomendando a varias de ellas que vengan a consulta para ser hipnotizadas. 


Estos dos casos demuestran la utilidad de combinar la técnica de la pregunta del milagro con la hipnosis naturalista o ericksoniana. Se ha podido observar el efecto sinérgico que ambos abordajes pueden generar para bien del consultante. La hipnosis orientada a las soluciones es una buena posibilidad para todos aquellos que practican este tipo de abordaje.